lunes, 11 de junio de 2012

La Alquimia del Amor

Bueno, se terminó. Así, suena frío y calculado pero es la realidad. Muchas veces uno intenta buscar explicaciones donde encuentra incongruencias existenciales que no le cierran. Sobre todo tratándose de las relaciones de pareja, sobre todo tratándose de la persona a la que le dijiste "te amo" en mas de una oportunidad. No me parece correcto hablar de motivos, cada uno es partícipe de su destino y debe hacerse cargo de sus propios demonios, es así que decidí hacerme cargo de los míos. 
"El peor enemigo de una persona es la omnipotencia de querer dominar situaciones que se le escapan de su control", cada una de las palabras de esa oración en su conjunto, me parecen la frase mas acertada que alguien me dijo en mis 22 años de vida. 
Vivimos y estamos inmersos en un ambiente tan pero tan choto, que difícilmente puede algo construirse sin sufrir al menos, unas cuantas sacudidas. Es por eso que considero que uno debe madurar primero, para poder ser capaz de madurar al lado de otra persona; es imprescindible la compañía constante, el avance de a dos para forjar un futuro. Porque de eso se trata. 
Todas las relaciones conllevan una doble percepción que muchos no quieren/pueden ver. La primera, y la mas hermosa de las dos, tiene que ver con el presente, el disfrute de cada momento en su mas intensa expresión. La segunda, la mas trabajosa, pero no por ello menos trascendente, es la construcción mutua de un mundo conjunto, proyectado en un mañana compartido y adquirido. Compartido lógicamente, por quienes son pareja, y adquirido, porque es un derecho que día a día se van ganando las personas que tienen una relación, basado en la confianza y entrega hacia el otro. Suena como una fórmula matemática para la felicidad, no es tan cuadrada como se ve escrita, pero considero que a grandes rasgos, esos son sus pilares fundamentales. 
El hecho de que una relación no funcione no es culpa de uno ni del otro, sino de ambos. El fracaso está dado por determinadas acciones que no compatibilizan con el modelo previamente expuesto y chocan con el mecanismo de funcionamiento planteado. Pero no por eso debe guardarse rencor hacia quien compartió tanto con uno, porque mas allá de toda la mierda que pudo haber en el medio, el amor muchas veces está y es muy fuerte y sentido. El tema mas duro de entender en todo ésto, es que a veces, con el amor solamente no alcanza. Será cuestión entonces de relajar los moldes prefabricados y entender que la compañía puede darse igualmente, sin forzar situaciones ni momentos. Dejarse llevar por lo que está en el hoy, porque el mañana es muy lejano y difuso. 
Me despido nuevamente, es probable que no hayan entendido ni un cuarto de la idea que quise expresar, así es de complicado todo lo que siento. 
Hasta la próxima! 

sábado, 10 de marzo de 2012

La pugna constante

Bueno. Una vez mas ingreso a éste sitio, al cual tenía voluntariamente olvidado, como a otras tantas cosas que relego, en una búsqueda constante de nuevas experiencias renovadoras que me llenen de buena energía ese vacío existencial que tengo -y que todos, en algún punto, tenemos-.
Extraños pensamientos aquejan mis neuronas en éste momento, las cuales luchan en una pugna constante por encontrar el sosiego que perdieron hace tiempo, entre tantos vaivenes de mierda. Por un lado, la reiterada idea de que no puedo confiar en nadie, y que nadie puede confiar en mi. Por otro lado, que no se hasta qué punto eso me molesta. Y por último, un deseo casi incontenible de hacerme daño.
Ordenando todas las ideas, lo primero que me viene a la mente es droga. Ya no mas un simple porro, o un fernet. Drogas propiamente dicho, drogas duras, de esas que te dejan del orto en serio, o viejos recuerdos lastimosos de daños físicos provocados por mi mismo, qué se yo, uno nunca sabe. 
Seguido de ese triste y patético sentimiento autodestructivo, encontramos la contracara perfecta: el olvido. El deseo irrefrenable de seguir adelante, dejando atrás el pasado, y con el a esas personas que tanto me han marcado, y dañado. El problema del olvido, es que es una utopía imposible de llevar a cabo, por lo menos de una forma perdurable en el tiempo, y que si es alcanzada a corto plazo, seguramente sea de la mano de algún estupefaciente -volviendo al punto anterior, dónde la faceta autodestructiva toma la ventaja-. Por otro lado, el olvido no es una manera inteligente de sobrellevar las situaciones dolorosas de la vida, porque con ellas viene la sabiduría y la oportunidad que nuestra psiquis nos ofrece, de NO cometer los mismos errores (paradoja interesante, teniendo en cuenta de que el ser humano mas de una vez tropieza con la misma piedra).
La escritura es la manera mas sana de sublimar el dolor y la mierda que tengo adentro, pero sé que no va a durar mucho tiempo la calma que ésta dulce herramienta proporciona, motivo por el cual tendré que buscar mas alternativas para seguir adelante, entendiendo que no soy perfecto, que vos tampoco lo sos y que de seguro la persona que lee ésto tampoco lo sea. De cualquier modo, siempre es lindo volver a volcarse a la redacción en su mas pura expresión, ya no tratándose de trabajo, o de cuestiones académicas, sino mas bien de una satisfacción y deseo personal de mejora.
De cualquier modo, gracias.